"Completamente loca", significa el título, y yo me muero por volver a ver a ese trío sobre el escenario volviéndose locos. Como dice la canción, para bailar hasta llorar de alegría. Una vez, un amigo me dijo que tras ver el clip de "Mon meilleur ami", pensó que Julie estaba loca, que parecía que estaba en el "viaje"; y así es, se monta en su pony color arcoiris nada más subir al escenario, para culminar juntos sin darnos cuenta en qué momento, arriba de un unicornio políglota de su música y nuestras voces.
Creo que fue en 2011 la vez que viví la experiencia Yelle en vivo, a dos metros del escenario. Y ya no veo la hora de que vuelvan, ahora para entonar juntos su nuevo sencillo "Complètement fou", parte del álbum con el mismo nombre, próximamente a la venta (30 de septiembre).
La canción saca de onda los primeros minutos porque suena distinto a las canciones de los otros álbumes. Tiene un sonido no sé si llamarlo maduro, pero que ha cambiado, así como la voz de Julie al interpretar la letra. No hay tantos agudos, no hay tanto electro-pop-pop (por llamarlo de alguna forma). Sin embargo, ahí están ellos adentro, su estilo se alcanza a distinguir. Ya a la segunda reproducción, nos tiene de vuelta.
Es como cuando dos amigos se dejan de ver por años: de pronto se encuentran y observan rasgos distintos, una mirada distinta tras la que hay vivencias-influencias nuevas de las que no fuiste testigo. Pero el descocierto queda atrás luego de redescubrir un tono al hablar, un lenguaje en común. Así pasa con la melodía, con la voz e incluso con el video. No cabe duda que esos bailarines y los elementos rarunos como el elote gigante o las palomitas azules, son Yelle. No cabe duda de que seguimos en el mismo canal.
Bienvenido "Complètement fou". Yelle, los sigo esperando.
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